Hay veces que me olvido del mundo
en irrigaciones de segundos todo se derrite
hipnotice la luna, la comí, la sangre
y aun hay veces que me siento ajena, oscura
me arranco la sombra, y le pido, que se siente
que se calme, que me mire.
Invado la muerte y la descubro
frente al ruido del mundo
llegando tarde a mi muerte
También a veces me siento a mirarte
tranquila, un segundo antes, de enloquecer-te
invito a mis ganas, y le pido que esperen
las tuyas
Nuevamente el abismo del conformismo
el delito de tu pretexto exigido
Lo lamento, mis ojos no son políticos
no mienten.
Y estas vos, y estoy yo
y, allá arriba también esta él.
Bendito cielo, respondiste
quebraste el suelo, pero respondiste
Te subís a mis hojas
y me lastimas la piel
te tragas mi orgullo
lo escupís, lo dejas bien lejos
soy un alma, desnuda, flagelada
soy un alma, dividida, reencarnada
sos mi parte,
sos mi alma.
3 comentarios:
excelente poema yan, de los mejores y es verdad tus ojos no mienten,tu pureza salvaje es pura poesia...
Dejarse guiar por nuestros sueños es la consigna.
Un abrazo Gus.
"el delito de tu pretexto exigido"
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