2.01.2009

X-way.-


Arrancando demonios emprendí un viaje al mar, me decidí por la vida fuera del tiempo. Quién sabe si es enero, abril o septiembre; quién podrá decir que significa que sea enero, abril o septiembre...un conformismo de erudito responde filológicamente a mi inquisición sin dientes. Exactamente lo mismo que sean las dos, las cuatro, o las veinte...esa cadena que hiere un cuerpo vegetal a conjunciones inútiles, un deseo a-sexuado de avanzar.
Camine intentando mitigar mis ansias alejando las imágenes del caos presentido, alborotada, cuál cielo quebrando la tierra, visualice ese templo, aquella vieja institución donde alguna vez un humano presagiando el capitalismo denomino "templo de fé". Sumisión al poder, diría mi personalidad, me acerco observando una señora dando lastima de sí, pidiendo con su suplica alguna redención, otorgando con la negación a su pedido la culpa al humano itinerante, la responsabilidad de su real creación.
Intento traer a mi memoria muerta la ultima vez que entre a una Iglesia, recuerdo tortuosamente -el día que falleció su tío acompañaste su silencio insulso, frígido- crucé la calle, mire el reloj, 20:45 hs.- rebote contra las enormes puertas, de nuevo mi personalidad ironizó- ¿qué pasa, Dios no atiende? ¿horario de comercio? te necesito, pero tu negocio esta cerrado, ¿qué hago...me jodo?- Risa soberbia te pega un cachetazo "yo soy" - Dios encerrado detrás de un muro no existe "Yo soy" vibra en la “llama trina". Sensación pagana de dolor...llega tu mensaje y te ofrezco los diablos que vendo, compras, ofreces un deseo. Sigo alborotada, cruzo en diagonal y mi mente sostenida en la mente, en el cuerpo del Todo comienza a hablarme. Los pájaros en el cielo dan vueltas furiosas, eco de sigilo falaz, la presentación obra como una fuerza aplicada bruscamente, señal desconcertante ¿cómo desobedecer? atino a sentarme en la esquina de la municipalidad suspendida debajo de ese árbol la impavidez me eleva lejos de lo mundano, no escucho tu señal, me suspendo y recuerdo- Siempre que lo provocas Él responde-
Regreso lentamente hurtando con mañas mí más allá, saco el celular de mi bolsillo y te contesto que te espero, que solo avises cuando llegues a la estación para conducirte, x-way.

6 comentarios:

Pablo Distinto dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Yan, sos una artista de verdad!!! Siempre te lo dije y te lo dirè, y muy inteligente. Ojalà y seguramente que sì, que llegues muy lejos, sàbes que siempre te digo que sigas luchando por tus sueños!! A pesar de todo...Siempre seguì para adelante. Estoy segura que vas a llegar muy lejos... no cambies nunca la sencilles que te caracteriza. Te adoro... y sàbes que por màs que no te vea seguido, siempre estoy para lo que necesites. Besos y cariños. ( còmo extraño los ricos mates que hacias en la office) ......jajaja! Que lindo momentos que pasamos no...?

Anónimo dijo...

Hermosaa Yann!!

me encantan las cosas que haces

besoo

Anto Nocito

Anónimo dijo...

muchas gracias por tus envios eres el Cristal que alumbra mi entendimiento, llevas luz, un escalon que siento adelante mio, no me atrevo pero casi siento que no podria aunque imagino como puede ser, hacer lo que tu haces de alguna manera instalaciones que son colagges de diversas expresiones artisticas.
Recuerda:
la sensibilidad de un cristal esta amenazada por la busqueda de una perfeccion que es parte del desarrollo escalonado de la misma vida que obliga a la existencia de indigos y ahora cristales por el primitivismo de la especie que necesita avatares o adelantados
esa humanidad aun cuanto que avatar, de todos modos encadena, sin embargo hay que vibrar con ella y solo manifestar lo que sale, en armonia con el espiritu que llevamos dentro y es el del todo infinito...
princesa cristal!

pablo pioluchi dijo...

no entiendo el título

Charly Santos dijo...

Por ahí iba yo, barrenando por el mar de la blogósfera, algo perdido. Sospecho que el oleaje debia de ser salvaje y furioso, porque fui tragado. En determinado momento caí en la cuenta de que ya no podía ver la costa, que todo era una maraña de bits, unos y ceros... Hasta que, gracias a la providencia, me topé con una luz en la inmensidad oscura, un faro que birllaba entre la confusión y atraía a los náufragos virtuales. Verdaderamente debo decir que acá, cristal. Exquicitos sus textos, sin dudas, pero la combinación de sabores es algo nuevo para mí, refrescante y levemente tóxica. En otras palabras (para ponerlo en criollo), "una masa lo que escribís, flaca, me voló la bocha".
Saludos cordiales y, si no molesta, seguiré leyedo.