Es de noche y el corazón incendia su verdad.
Nadie puede mantener en el tiempo el dolor
sin añadirle una dosis más.
Vos y yo nos conocemos.
El comienzo fue una curva rodeando lo tipico
declarando nuestro coloquio lejos de lo convecional
estricta la razón disto la vulgar trama
todos nuestros sentidos-todos-abrieron sus ojos
y todas nuestras pieles-todas-quebraron nuestra especie.
Los más sencillo es enamorarse de lo que uno no conoce
y nuestros disfraces se ignoran
ergo nuestras almas de otras vidas se desarman
nos matamos tanto tiempo y hoy nuestros átomos
estan disueltos.
En la distancia me otorgas el oficio de preceptora
y al situarnos en un común cuadro soy tu servidora
la asesina de tus plegarias...
Sabes, tu seducción me desgarra
Caígo de rodillas y espero ansiosa
que no ignores nuestros lazos.